viernes, 7 de octubre de 2011

Génesis: 8 de octubre.

Génesis: 8 de octubre

                                “Frontera de luz
                                 Hoja entreabierta:
                                 La eternidad te espera”.
                                                 Susana reyes

I
Dolores de una Eva
que por vez tercera
engendra.
Me condena a este rumor
agazapado en el pecho:
vivo.

Soy un nuevo adán
con pecado concebido.

II
De palabras estoy hecho
a mi antojo nombro al mundo
aún no conozco el miedo.

III
El edén me cabe en el bolsillo,
la verdad es mi frontera.
No existe memoria:
cada día me lo invento nuevo.

IV
Conquisto naciones
soy el héroe
rodillas y codos raspados
cicatrices de combate.

V
Mi Eva siempre responde bien
las preguntas de un filósofo sin dientes,
escuela, libros, lonchera y uniforme:
felicidad y la siesta de la tarde.

VI
La inquietud es como un sismo.
Me quejo de no ser grande,
quiero alcanzar las cosas
y hacer lo que hacen mis hermanas.

VII
Soy un fruto más
de un podrido árbol genealógico.
Celebro mis cumpleaños
y descifro mi apellido
cada vez que me encuentro en otros rostros.

VIII
No entiendo muchas cosas:
la furia en los ojos de mi padre
las borracheras y sus canciones revolucionarias.
No entiendo las lágrimas
No sé de consuelos.

IV
Tengo hambre del mundo
quiero comerme el cielo
y vomitar las estrellas.

X
No temo a la noche
ni me orino en la cama
si mamá está conmigo.
No sé qué hace la gente sin madre
para encontrar a Dios
en el padre nuestro.

XI
No lloro.
No extraño,
solo compruebo
si se puede vivir sin padre.

XII
¿Cuántos octubres han pasado
antes de mí?
¿Cuántos octubres se esconden
con su viento enamorado?
Quiero ser un cometa que vuele lejos
atado al mundo
o a la mano de un niño que corre.

XIII
¿Qué hacer con el huracán
que se desató entre las piernas?
¿con esa sensación escurridiza
de saberme en compañía?

XIV
Mi habitación sufre conmigo,
enterré mis juguetes
y las canciones infantiles
ya no caben en ninguna parte.
otra música, otra ropa
hoy me invento los problemas
y me finjo incomprendido.

XV
Nadie me advirtió
que sentiría tanto frío,
que mi cama sería un desierto
en el que me perdería.
Nadie me dijo
que buscara con cuidado
cuando decidiera enamorarme,
que es fácil equivocarse
y que a esta edad
cualquier cosa es amor.

XVI
Si el tiempo fuera arena
quiero vivir en una playa
y escribir mi dolor a la orilla
para que lo borre el mar.

XVII
Fuera del paraíso,
el mundo es malo.
Cada cual camina solo,
carga sus muertos.

XVIII
La eternidad dura
lo que tardo en pronunciarla.
Expulsado del paraíso
con el pecado en la sangre,
amargo mis días
con la certeza
de nunca tener nada claro
nada mío
nada eterno.